lunes, 27 de octubre de 2014

Inteligencia emocional



Cuando escuché por primera vez el constructo de Inteligencia Emocional, lo hice a partir del best seller publicado por Daniel Goleman en 1995; pero es ahora cuando accedo a los planteamientos que anterior a Goleman ya venían realizando otros autores en relación con aquella habilidad de utilizar las emociones para la vida.

El modelo de habilidad, como es reconocido el planteamiento que Salovey y Mayer (1990), venían profundizando desde años atrás, define la Inteligencia Emocional como habilidad para controlar nuestras emociones y las de los demás, discriminar entre ellas y usar dicha información para guiar nuestro pensamiento y nuestras acciones. 


El modelo de habilidad plantea que la inteligencia emocional presenta diferentes niveles de desarrollo y que pasar de uno nivel inferior a uno superior, lo que se están dando son mayores complejizaciones en la manera como las emociones entran a participar en nuestras vidas. 

Fuentes principales: P. Lizeretti, N. (2012). Terapia basada en inteligencia emocional. Manual de tratamiento. España: Editorial Milenio.

domingo, 19 de octubre de 2014

Ecología de la acción


"La ecología de la acción nos indica que toda acción escapa cada vez más a la voluntad de su autor a medida que entra en el juego de las interretroacciones del medio en el que interviene. Así, la acción no sólo corre el riesgo de fracasar, sino también de que su sentido se vea desviado o pervertido" (Morin, 2006. p. 47).







Fuentes principales. Morin. E. (2006). El método 6. Ética. 1ª ed. Barcelona:  Gedisa. y Youtube. 

domingo, 12 de octubre de 2014

Terapia narrativa


La terapia narrativa, como concepto disciplinar, es atribuido a Michael White y David Epston.

Con el planteamiento de terapia narrativa no se pretende dar nombre a un tipo particular de terapia como un procedimiento estándar o una metodología precisa y contrastada. Se fundamenta en el construccionismo social, ya que privilegia, entre otras elementos, la función del lenguaje como constructora de realidades.

Esencialmente la terapia narrativa se fundamenta en la idea según la cual los seres humanos buscan el sentido de su experiencia vital a través de compartir historias acerca de quién cree que es y quién cree que no es, qué piensa y qué no piensa, qué hace y qué no hace, qué siente y qué no siente.

En palabras de White, la terapia narrativa es una estrategia de análisis interpretativa en donde se exploran e interpretan las vivencias desde el sistema de creencias y el significado a través del relato; y en donde el terapeuta, a partir de preguntas, favorece la construcción de historias  alternativas.

Para este enfoque interventivo, el problema separado de las personas y asume que las éstas tienen muchas habilidades, competencias, convicciones, valores, compromisos y capacidades que les permitirá reducir la influencia del problema en sus vidas.




*Fuentes principales: 
Payne. M. (2002). Terapia narrativa. Una introducción para profesionales. Barcelona, Paidós.
White, M. (2002). El enfoque narrativo en la experiencia de los terapeutas. Barcelona, Gedisa
White, M. (2002). Reescribir la vida. Entrevista y ensayos. Barcelona, Gedisa

ss

lunes, 6 de octubre de 2014

LA HUMILDAD





La humildad es un valor atribuido a aquellas actitudes con las que las  personas no presumen de sus logros. Se relaciona con la habilidad de reconocer los fracasos y las debilidades, pero sin dejar de lado que también se puede reconocer las fortalezas (pero no presumir de ellas). 

La humildad es una de las principales características atribuidas a l@s sabi@s, y no solamente por la sabiduría que comparten con nosotr@s, sino porque ellos saben que los seres humanos somos diferentes y que dichas diferencias no hacen mejores a unos y a otros.

"La humildad es la base y fundamento de todas las 
virtudes. y sin ella no hay alguna cosa que lo sea" 
                                           Miguel de Cervantes

Desde el punto de vista virtuoso, consiste en aceptarnos con nuestras habilidades y nuestros defectos, sin vanagloriarnos por ellos. del mismo modo, la humildad es opuesta  a la soberbia. Una persona humilde no es pretensiosa, interesada, ni egoísta como lo es una persona soberbia, quien se siente auto-suficiente y generalmente hace las cosas por conveniencia*.

*Wikipedia, la enciclopedia libre


"Una mente dispuesta a reconocer que sabe que no sabe"